En nuestro centro de kinesiología, comprendemos la importancia de tratar adecuadamente la Rotura del Tendón de Aquiles y mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes. Descubre más sobre esta afección y cómo podemos ayudarte a recuperarte.
¿Qué es la Rotura del Tendón de Aquiles?
El tendón de Aquiles es un cordón fibroso que une los músculos de la pantorrilla con el hueso del talón. Una rotura, que puede ser total o parcial, suele ocurrir debido a un estiramiento excesivo del tendón, especialmente durante actividades deportivas explosivas o que requieren cambios de dirección bruscos.
¿ Cuáles son las causas de la Rotura del Tendón de Aquiles?
La rotura del tendón de Aquiles, es una lesión común en hombres de entre 30 a 40 años de edad, principalmente aquellos que practican deporte de manera ocasional. En general, está relacionado con deportes que presentan características explosivas o de cambios de dirección. Esta lesión está relacionada con un largo tiempo de reposo, necesitando estar alejado del deporte durante meses.
Cabe destacar, que una lesión de tendón no es de la noche a la mañana, los pacientes que padezcan de esta lesión, probablemente ya acarreaban un proceso degenerativo de meses y quizás de años. Esto producto de un mal entrenamiento o sobrecarga del tendón.
¿Cuáles son los síntomas de la Rotura del Tendón de Aquiles?
Los síntomas incluyen dolor intenso y hinchazón cerca del talón, acompañados a veces de un sonido de rotura durante la lesión. La incapacidad para realizar movimientos o aplicar fuerza en la pierna afectada también es común.
¿Cuál es el tratamiento de la Rotura del Tendón de Aquiles?
El tratamiento varía dependiendo de la edad, nivel de actividad y gravedad de la lesión.
Generalmente el tratamiento de esta lesión es quirúrgico, donde existen diversos tipos de técnicas para la reparación del tendón aquiliano, desde las más simples que van desde la sutura de este, hasta algunas más complejas, donde se puede reforzar esta sutura del tendón a través de fascia o de injertos tendinosos. A su vez, esta cirugía puede ser abierta a través de una incisión o de pequeñas incisiones. Sea cual sea la técnica elegida por el médico, el fin será el mismo, la unión del tendón.
Luego de la cirugía es importante que se realice una rehabilitación kinésica enfocada en el manejo del dolor y la inflamación, junto con la recuperación de la función del pie, fortaleciendo y flexibilizando el tríceps sural.
Si tienes diagnosticada esta lesión y necesitas tratamiento, te recomendamos evaluarte con nuestros kinesiólogos para determinar el mejor tratamiento personalizado para tu caso.