La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune que ocurre cuando el sistema inmunitario ataca los tejidos del cuerpo, causando inflamación, dolor y rigidez en las articulaciones. Esta condición puede afectar cualquier articulación, aunque es común en las muñecas y los dedos. Además de dañar las articulaciones y los tejidos circundantes (tendones y músculos) que puede provocar una disminución de la movilidad y de la función articular, la inflamación crónica puede afectar a otros órganos como el corazón, el pulmón o el riñón. Es por esto que la artritis reumatoide se considera una enfermedad sistémica (o lo que es lo mismo, generalizada). Además, si la inflamación es elevada y mantenida, puede provocar fiebre, cansancio importante, pérdida de peso y pérdida de apetito.
¿Qué es la Artritis Reumatoide?
La artritis reumatoide es una enfermedad sistémica, lo que significa que puede afectar no solo las articulaciones, sino también otros órganos como el corazón, los pulmones y los riñones.
¿Cuáles son las causas de la Artritis Reumatoide?
Las causas exactas de la artritis reumatoide (AR) aún no se comprenden completamente, pero se cree que se deben a una combinación de factores genéticos, ambientales y del sistema inmunológico. A continuación, se describe cada uno de estos factores:
1. Factores genéticos:
- Existe una predisposición genética para desarrollar AR.
- Las personas con ciertos marcadores genéticos, como ciertas variantes del gen HLA-DRB1, tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.
- Sin embargo, tener estos marcadores genéticos no significa que una persona definitivamente desarrollará AR, ya que otros factores también juegan un papel importante.
2. Factores ambientales:
- Se ha sugerido que ciertos factores ambientales, como infecciones virales o bacterianas, pueden desencadenar la AR en personas genéticamente susceptibles.
- Sin embargo, no se ha identificado un agente infeccioso específico como la causa única de la enfermedad.
- Se necesitan más investigaciones para comprender completamente cómo los factores ambientales interactúan con la predisposición genética para causar AR.
3. Disfunción del sistema inmunológico:
- En la AR, el sistema inmunológico ataca por error las propias células y tejidos sanos del cuerpo, en particular las membranas sinoviales que recubren las articulaciones.
- Este proceso inflamatorio crónico causa daño en las articulaciones y puede llevar a la deformidad y discapacidad.
- Las razones exactas por las que el sistema inmunológico se vuelve disfuncional en la AR aún no se comprenden completamente.
4. Factores hormonales:
- Se ha observado que la AR es más común en mujeres que en hombres, lo que sugiere un posible papel de las hormonas en la enfermedad.
- Los cambios hormonales, como los que ocurren durante el embarazo o la menopausia, pueden influir en la actividad de la AR en algunas personas.
- Se necesitan más investigaciones para comprender mejor la relación entre las hormonas y la AR.
5. Tabaquismo:
- Fumar cigarrillos se ha asociado con un mayor riesgo de desarrollar AR y de que la enfermedad sea más grave en personas que ya la padecen.
- El tabaquismo puede desencadenar respuestas autoinmunes y aumentar la inflamación en el cuerpo.
- Dejar de fumar es una de las mejores cosas que pueden hacer las personas con AR para mejorar su salud y reducir el progreso de la enfermedad.
Es importante destacar que:
- La AR es una enfermedad compleja y puede variar de una persona a otra.
- Los estudios continúan investigando las causas subyacentes y los mecanismos exactos involucrados en esta enfermedad autoinmune.
- Si tiene preguntas o inquietudes sobre la AR, hable con su médico.
¿Cuáles son los síntomas principales de la Artritis Reumatoide?
Los síntomas incluyen:
- Articulaciones inflamadas, calientes y sensibles.
- Rigidez articular sobre todo por la mañana o después de períodos prolongados de reposo.
- Déficit de movilidad de las estructuras afectadas.
- Se afectan las pequeñas articulaciones de las manos y los pies, aunque también es frecuente la afectación de otras articulaciones más grandes como los codos, los hombros, las rodillas o los tobillos.
- Las deformidades típicas de la artritis reumatoide avanzada son los dedos en cuello de cisne, la deformidad en ráfaga cubital, la deformidad en boutonniere y el pulgar en Z.
¿Cuál es el tratamiento de la Artritis Reumatoide?
Aunque no existe una cura para la artritis reumatoide, hay tratamientos disponibles para aliviar los síntomas y ralentizar la progresión de la enfermedad. Esto incluye el tratamiento farmacológico para reducir el dolor y la inflamación, así como la terapia kinésica para prevenir daños estructurales en las articulaciones y mejorar la movilidad. Además, el ejercicio regular puede ayudar a mejorar la oxigenación del cuerpo y fortalecer los músculos, lo que puede ser beneficioso para quienes padecen esta enfermedad.
La artritis reumatoide puede ser una enfermedad debilitante que afecta la calidad de vida de quienes la padecen. Sin embargo, con el tratamiento adecuado y la atención kinésica adecuada, es posible controlar los síntomas y mantener la función articular.
Es importante buscar la orientación de profesionales de la salud, como los kinesiólogos especializados en rehabilitación, para desarrollar un plan de tratamiento personalizado que se adapte a las necesidades individuales de cada paciente.
Si tienes diagnosticada esta lesión y necesitas tratamiento, te recomendamos evaluarte con nuestros kinesiólogos para determinar el mejor tratamiento personalizado para tu caso.