El ligamento cruzado anterior(LCA), corresponde a uno de los principales elementos estabilizadores de la rodilla, va desde el fémur a la tibia y su función es evitar que la tibia se desplace excesivamente hacia adelante
¿Qué es?
La lesión del ligamento cruzado anterior (LCA) representa el 50% del total de las lesiones ligamentosas de la rodilla. Los deportes con mayor frecuencia de lesiones del LCA son el fútbol, basquetbol, esquí y beisbol, representando el 78% de estas lesiones.
La mitad de estas lesiones se asocian además a lesión del menisco interno y cerca de un 15% se asocian a lesión del ligamento colateral medial.
¿Por qué se produce?
Este ligamento es el más común de lesionar en las actividades deportivas, debido a que es uno de los estabilizadores más importante de la rodilla. Comúnmente se lesiona en deportes de contacto como el fútbol, rugby o artes marciales
¿Cuáles son los síntomas?
- Sensación de inestabilidad o de que “la rodilla está suelta”
- Aumento de volumen y dolor importante en la rodilla
- Dolor o malestar al mantener la rodilla muy estirada
- Dificultad para pasar de estirar a doblar la rodilla por “miedo” a que se salga
- Pérdida de fuerza en la rodilla afectada
¿Cuál es el tratamiento?
Si se sufre un esguince el tratamiento consiste en inmovilización más kinesiterapia, este se da en roturas parciales o esguinces grados 1-2 del LCA, pero si se rompe por completo, casi siempre tiene resolución quirúrgica la cual siempre es acompañada de una posterior terapia kinésica.