¿Qué es?
La artrosis o osteoartritis es la enfermedad degenerativa articular más frecuente, esta se caracteriza por la destrucción del cartílago hialino que recubre las superficies óseas.
La función del cartílago hialino es la de amortiguar y evitar el roce entre los extremos de los huesos que componen una articulación. Cuando se desarrolla la artrosis, este cartílago pierde sus propiedades, pudiendo incluso llegar a desaparecer, haciendo que los extremos de ambos huesos rocen directamente, produciendo dolor.
Habitualmente se localiza en la columna cervical y lumbar, algunas articulaciones del hombro y de los dedos de las manos, la articulación de la raíz del pulgar, la cadera, la rodilla y la articulación del comienzo del dedo gordo del pie.
¿Cuáles son sus síntomas?
El síntoma fundamental es el dolor, con frecuencia descrito como intenso, profundo y mal localizado es el primer síntoma y, cuando se presenta en las articulaciones que sostienen mayor carga, suele empeorar con las actividades que implican soportar el peso corporal (como permanecer de pie) y, en general, empeora a medida que avanza el día. Con el progreso de la enfermedad, el dolor puede aparecer con el reposo o el descanso nocturno.
A medida que el trastorno va causando más síntomas, la articulación pierde movilidad y finalmente pierde la capacidad de estirarse y doblarse por completo. A su vez, el crecimiento de los extremos de los huesos que forman la articulación puede hacer que la articulación se agrande y ensanchen, estas superficies irregulares de los cartílagos hacen que las articulaciones crujan o “suenen” al moverlas, y se vuelven dolorosas a la palpación.
Es muy común en la artrosis de los dedos de la mano que se desarrollen prominencias óseas,en las puntas de los dedos los denominados nódulos de Heberden o en las articulaciones de la parte media de los dedos los denominados nódulos de Bouchard.
¿Cuál es su tratamiento?
Los principales objetivos del tratamiento de la artrosis son
- Aliviar el dolor
- Mantener la flexibilidad articular
- Optimizar la función articular general
Las terapias actualmente disponibles son:
- Kinesiología, cuya terapia es primordial para disminuir el dolor, la rigidez articular y mejorar la función en la articulación afectada. La idea de esta terapia es mejorar la fuerza muscular y disminuir la comprensión en la articulación.
- Tratamiento farmacológico: como primera opción, el paracetamol. Como antiinflamatorios no esteroideos se tiende a emplear los inhibidores de la COX-2 (celecoxib y rofecoxib). En algunos momentos pueden ser otros analgésicos como el tramadol o la codeína.
- El sulfato de glucosamina y el condroitín sulfato estimulan la síntesis de matriz extracelular del cartílago y parece que ejercen un control moderado sobre el dolor articular, si bien los estudios realizados no muestran resultados totalmente definitivos. Los corticoides intraarticulares pueden ser eficaces en casos puntuales.
- El ácido hialurónico y los factores de crecimiento plaquetario intra-articulares tienen un efecto analgésico-antiinflamatorio y protector del tejido.